jueves, 13 de noviembre de 2008

Tengo Razones

razones de sobra, para pedirle al viento que vuelvas aunque sea como una sombra. Tengo razones para no quererte olvidar, porque el trocito de felicidad fuiste tú, quien me lo dio a probar. Mi ropa te busca a ti.
La sustancia insoluble del vino que hidrata las noches célebres.
Si el suelo se pisa, que sea para caminar como un arpegio de guitarra, en direcciones inhóspitas y con largas notas que gastaron papel a causa de recuerdos. ¿ Cómo me quito las ganas de que nadie me vea? Que de pronto son años en los que te doy canciones como puertas que dan salida de las sombras de la madrugada para que al abrir los ojos, me veas y sólo tú...no ciudades que se derrumbaran algún día.
Tengo visiones de estar a un camino, en los esbosos las decisiones inciertas del futuro. Con Certezas, cerezas, de que la vida me llevó al camino que le corresponde al miedo, su némesis: Seguridad.
Sonríe, que todo en la vida es un carnaval.

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